El Gobierno acusó una maniobra política tras el revés en el Senado

Tras más de seis horas de debate, el Senado de la Nación rechazó este jueves los pliegos de Ariel Lijo y Manuel José García Mansilla, los dos candidatos propuestos por el presidente Javier Milei para integrar la Corte Suprema de Justicia.
La decisión generó una dura respuesta por parte del Ejecutivo. A través de un comunicado, la Oficina del Presidente expresó su "repudio" al rechazo y acusó a los senadores de priorizar "la preocupación por sus causas judiciales y las de sus dirigentes" por sobre el funcionamiento del Poder Judicial.
"Durante el último año, los senadores tuvieron a disposición los pliegos de los doctores Manuel García-Mansilla y Ariel Lijo, participando en todas las instancias del proceso de selección establecido por la normativa vigente. Sin embargo, luego de dilatar la votación durante meses, optaron por priorizar intereses personales en detrimento del funcionamiento de uno de los tres poderes de la República", afirmaron.
El comunicado remarcó el carácter inédito del rechazo: "Por primera vez en la historia, el Senado ha rechazado pliegos propuestos por un Presidente, por motivos meramente políticos y no por cuestiones de idoneidad ", lo que, según el Gobierno, "evidencia una vez más que la Cámara Alta es el refugio de la casta política en el Congreso de la Nación".

Además, desde la Presidencia advirtieron que "la politización de la justicia representa una amenaza para la democracia" y que "mientras la clase política anteponga su protección penal a la normalización del sistema judicial, el derecho a la justicia continuará limitado en la República Argentina".
"El Presidente de la Nación continuará trabajando incansablemente para garantizar la independencia judicial y restaurar la confianza del pueblo en las instituciones, utilizando todas las herramientas que la Constitución Nacional y el voto popular han puesto en sus manos", concluye el mensaje oficial.