Caminar por la calle, un verdadero terror: el episodio de acoso callejero a una menor
Salió a hacer un mandado y un hombre la acosó. Su familia golpeó al agresor y ahora brindó detalles de lo sucedido.

En la noche del sábado, personal de la Comisaría Primera de Resistencia intervino en un desorden en inmediaciones de la avenida 9 de Julio y calle José Noveri, frente a la sede de la empresa SAMEEP.
Según el informe policial, una mujer de 34 años denunció que su hija, una adolescente de 13 años, fue víctima de acoso verbal por parte de un trabajador de SAMEEP mientras caminaba por la zona. El sospechoso fue identificado como S.I.V., de 25 años.
A varios días de lo ocurrido, Diario TAG habló con la madre de la víctima, quien relató cómo fue el atroz momento que tuvo que atravesar su hija: "Ella había salido a hacer un mandado y volvía cuando pasó esto. Después de lo sucedido, llegó hasta cerca de mi casa y estaba una vecina afuera, a la que le contó todo. Mi hija ya no lo podía ver, se agarraba la cabeza y gritaba, entonces la mandé a mi casa con mi otra nena. Ahí me quedé yo porque él salió a correr".
En relación al autor del hecho, la denunciante comentó que el hombre corrió y se escondió en SAMEEP:
"No me quería dar la cara y sus compañeros lo primero que empezaron a decir es que él hace pocas semanas había entrado a trabajar y que ellos no tenían nada que ver".
Sumado a eso, detalló: "Él reconoció los hechos, pero se contradecía y decía que no pensaba que ella era una menor. Le quería pedir disculpas a mi hija, pero ella ya no estaba ahí porque la mandé a mi casa. Todos los vecinos fueron porque querían hacer justicia por mano propia".
La familia denuncia demás inacción desde Sameep, donde trabaja el acusado. "Desde la empresa no querían ni llamar a la policía, nosotros tuvimos que llamar cada rato. Querían que quede todo así".
El estado de salud de la joven
El violento hecho de acoso callejero marcó a la joven de 13 años, quien aún no puede recuperarse.
"Ella no duerme de noche desde el sábado, imaginate cómo está. Desde la línea 102 mandaron a que la vea el Servicio a la Adolescencia, el miércoles la van a ver. También me mandaron a la fiscalía a insistir porque me enteré de que ya le dieron la libertad".
"Estoy muy mal porque nunca nos pasó, siempre lo vemos en las noticias y ahora nos toca a nosotros. Doy gracias a Dios de que mi hija está viva, porque siempre le hablo y ella pudo correr. Hay muchas criaturas, hoy fue mi hija. El tipo no puede estar libre habiendo hecho esto", cerró finalmente la denunciante, quien teme por su hija y porque otras mujeres puedan atravesar lo mismo.