Investigan irregularidades millonarias por un tren inaugurado por los Kirchner en Santa Cruz
La puesta en funcionamiento se llevó a cabo en el 2015 y solo funcionó una sola vez para su inauguración. En la actualidad solo quedaron los vagos y los poco más de 9 kilómetros de vías férreas.
El tren turístico Eva Perón, que recorrió un breve tramo entre Río Gallegos y Río Turbio en un acto de campaña electoral en 2015, se encuentra hoy en el centro de denuncias por corrupción e irregularidades administrativas. Aquel recorrido inaugural fue la única vez que funcionó, siendo calificado por la justicia como una "falsa inauguración" encabezada por Alicia y Máximo Kirchner.
El proyecto, cuyo presupuesto inicial alcanzó los 667 millones de pesos (unos 70 millones de dólares al cambio oficial de la época), dependía de la empresa minera YCRT y nunca se completó. Según un informe reciente de la SIGEN, se detectaron irregularidades como "patrimonio comprometido" y falta de información sobre las inversiones realizadas. Además, la obra quedó abandonada en la estancia Killik Aike Sur, donde existen aproximadamente 10 kilómetros de vías inconclusas. El propietario del terreno declaró no haber firmado convenios para las obras en su propiedad.
El caso está rodeado de cifras millonarias: 453 convenios y 90 adendas por 443 millones de pesos fueron firmados bajo el programa de "puesta en valor del ramal ferroviario". La justicia identificó sobreprecios, facturas sin rendir y fondos utilizados en obras no justificadas. Según el fiscal federal Carlos Stornelli, se ejecutaron 66 convenios específicos por un total de 667 millones de pesos. Sin embargo, sólo se pagaron 198 millones, quedando deudas y sumas sin justificar.
Entre las anomalías más graves, se asignaron 48 millones de pesos para material rodante que no fue utilizado, y 14 millones para campañas de comunicación inexistentes. En el caso del "Ramal 750", 55 millones de pesos destinados al tendido ferroviario tampoco fueron aplicados correctamente.
La actual intervención de YCRT busca recuperar los materiales abandonados en la estancia Killik Aike para utilizarlos en la red ferroviaria que conecta Río Turbio con Punta Loyola. Este esfuerzo forma parte de un "plan de salvataje" destinado a evitar la expropiación de la compañía, que opera con un déficit millonario. Según datos oficiales, el rojo financiero de YCRT asciende a 8.728 millones de pesos en 2024, y el 96% de su presupuesto se destina al pago de salarios.
La justicia federal continúa investigando el entramado de convenios celebrados entre el extinto Ministerio de Planificación, YCRT y la Universidad Tecnológica Nacional (UTN). Testimonios de auditores de la SIGEN revelaron que no existe documentación que justifique la necesidad de la obra, ni el destino final de los fondos asignados. En palabras de las actuales autoridades de YCRT: "Sólo dejaron tres vagones abandonados sin locomotora y material tirado en una estancia privada".
Para esta obra puntual según la elevación a juicio oral del caso, se suscribieron al menos 66 convenios específicos con la finalidad de ejecutar distintas actividades que resultaban "necesarias para cumplir con el objeto de puesta en valor del Ramal Ferro Industrial Eva Perón". El monto total involucrado para la concreción de este proyecto fue de 667.807.728,64 pesos.
