Detuvieron en Buenos Aires al presunto doble homicida de Castelli
A través de un despliegue en conjunto con las fuerzas de ambas provincias, lograron dar con Rubén Alejandro Pérez, implicado en la muerte de sus dos jefes en la localidad del interior chaqueño. El arma utilizada para el crimen sería un palo que estaba en la escena del crimen.
La Policía de la provincia de Buenos Aires logró capturar a Rubén Alejandro Pérez, presunto autor del doble homicidio ocurrido días atrás en la localidad de Juan José Castelli, Chaco. El sujeto fue hallado por la fuerza en Isidro Casanova dentro del partido de La Matanza, en la provincia de Buenos aires. La aprehensión tuvo lugar ayer por la noche.
A través de una serie de diligencia, la fuerza chaqueña tomó conocimiento que el presunto responsable del doble crimen habría emprendido un viaje a Buenos Aires. A partir de ello, y luego de un trabajo de seguimiento, las Policías de ambas provincias se pusieron en contacto para lograr la detención del Pérez.
Una vez que fue capturado San Alberto, Isidro Casanova partido de La Matanza, los agentes realizaron los trámites Judiciales de rigor a los fines de lograr la extradición de la persona al Chaco.
SOBRE EL HECHO
La policía investiga las circunstancias en las que murieron Orlando Alegre y Manuela González, una pareja que tenía un negocio de alpargatas. La principal pista apunta a su empleado, quien fue visto dejando la casa el día del crimen.
El viernes 20 de diciembre, alrededor de las 18 horas, la Policía del Chaco recibió un informe sobre el hallazgo de dos cuerpos sin vida en una vivienda del Barrio Norte de Castelli. Los cuerpos, correspondientes a una pareja, Orlando Alegre de 60 años y Manuela González de 50 años, presentaban un avanzado estado de putrefacción. La investigación está siendo llevada a cabo por la Fiscalía Nº 2, bajo la dirección del Dr. Gerónimo Agustín Roggero, quien ya trabaja en el esclarecimiento de este presunto doble homicidio.
Los cuerpos de las víctimas fueron encontrados en el comedor de la vivienda, y ambos mostraban lesiones en la región del cráneo. La mujer estaba de cúbito dorsal y el hombre de cúbito ventral. Ambas víctimas presentaban un derrame de fluido color rojizo en la zona de la cabeza, lo que indica que podrían haber sido golpeados con un objeto contundente. En el lugar se halló un fragmento de madera, tipo bate, con manchas rojizas y cabello, que podría haber sido utilizado en el ataque.
