Arancelamiento universitario para extranjeros: la medida abarcaría a casi 80.000 estudiantes
Se trata del 3,9% de la matrícula en las carreras de grado de universidades públicas. La mayoría de estudiantes provienen de Brasil y Perú.
El Gobierno anunció que las universidades nacionales tendrán la posibilidad de cobrar aranceles a los estudiantes extranjeros no residentes, según explicó el vocero presidencial, Manuel Adorni. Este cambio, vinculado a una serie de modificaciones en el régimen migratorio, busca avanzar "hacia un país ordenado" y generar nuevas fuentes de financiamiento para las instituciones educativas.
El anuncio generó sorpresa tanto en el ámbito académico como en el Ministerio de Capital Humano, que no estaba al tanto de esta iniciativa. En su declaración, Adorni indicó que "se va a disponer que las universidades nacionales puedan cobrar aranceles a los estudiantes extranjeros no residentes. Esto va a representar una fuente de financiamiento para las casas de estudio". Sin embargo, organismos como el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y la Universidad de Buenos Aires (UBA) no habían recibido información previa al respecto.
Actualmente, los extranjeros representan el 4,3% de la matrícula total en el sistema público universitario y el 3,9% en las carreras de grado, lo que equivale a casi 80.000 estudiantes. Dentro de las carreras de Medicina, esta proporción alcanza niveles más altos, llegando al 30% en algunas universidades. Por otro lado, el porcentaje de estudiantes extranjeros en posgrado es del 9,2%, aunque esta instancia ya está arancelada.
La mayoría de los estudiantes internacionales proviene de países de América Latina, con Brasil y Perú liderando en número de matriculados, seguidos de Paraguay, Bolivia, Colombia y Venezuela. El Gobierno planteó la posibilidad de exceptuar del arancelamiento a los estudiantes venezolanos debido a las condiciones que los obligaron a emigrar.
El arancelamiento de la educación para extranjeros fue incluida dentro de la primera versión de la Ley Bases, presentada en diciembre de 2023, pero fue descartada en el Congreso. Este año, tras el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario y durante la segunda Marcha Federal Universitaria, el tema volvió a estar en discusión, aunque sin avances concretos.
A nivel internacional, la presencia de estudiantes extranjeros es considerada un indicador de calidad universitaria.