AMET ratificó su "profundo" rechazo a la reducción de ciclos formativos en las secundarias técnicas
Desde la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) manifestaron que "esta medida no solo atenta contra la calidad educativa de un sistema consolidado a lo largo de décadas, sino que también pone en riesgo el desarrollo profesional y productivo de los estudiantes".
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Tras el Congreso Nacional de Secretarios Generales de las Regionales de la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) realizado el 05 de noviembre en Buenos Aires, emitieron un comunicado en donde explicaron que "la propuesta de reducción de la duración formativa debilita esta preparación, ignorando los avances logrados en la incorporación e integración de conocimientos técnicos, científicos tecnológicos y especializados en esta modalidad educativa".
Asimismo, afirman que hoy en día, estos conocimientos son "fundamentales para adaptarse e intervenir en el mundo del trabajo, atravesado por las nuevas formas de producción".
"En un mundo en constante evolución, que incorpora herramientas avanzadas como la automatización, la robótica, la inteligencia artificial, entre otras, exige que nuestros estudiantes desarrollen capacidades profesionales, que son competencias altamente requeridas en estas nuevas realidades, otorgándoles, el tiempo y la dedicación necesaria para tal fin", continúan.
"La educación técnica profesional es pilar de progreso y soberanía productiva, porque es una herramienta estratégica que forma técnicos y profesionales capaces de sostener el desarrollo industrial, tecnológico y productivo de la Argentina. Este modelo de educación, ampliamente reconocido a nivel nacional e internacional, asegura que nuestros egresados cuenten con una preparación completa y de calidad que los habilita para desempeñarse positivamente ante los desafíos que se presentan del mundo laboral actual y proyectarse en el futuro", explica el texto.
La Ley de Educación Técnico Profesional N.º 26.058, en su Artículo 24, establece que los "planes de estudio de la ETP de nivel medio tienen una duración mínima de seis años". Así mismo tiene como objetivo "desarrollar habilidades y destrezas para el trabajo y se estructura en cuatro campos de formación: Formación general, Formación científico-tecnológica, Formación técnica específica y Prácticas profesionalizantes".
Luego, afirman que esta ley, "producto de años de trabajo y consenso", reconoce que una formación técnica de "alta calidad demanda un tiempo necesario y suficiente para el aprendizaje". "Estas prácticas, diseñadas y planificadas cuidadosamente por especialistas y expertos en este campo de la educación, permiten que los estudiantes desarrollen destrezas concretas, pensamiento lógico-formal, capacidades para la resolución de problemas, todas ellas esenciales para el ejercicio profesional responsable", argumentaron.
En este contexto, explica que son "conscientes de los desafíos que implica esta formación y de la necesaria revisión de los diseños curriculares, con el propósito de mejorar cualitativamente esta oferta educativa y proyectar en los perfiles de los egresados, una mayor competitividad, para responder a las demandas de la industria del siglo XXI, atendiendo a las necesidades socio productivas, incorporando procesos de producción asociados a las nuevas tecnologías, promoviendo el acceso a la capacitación continua y permanente de la docencia técnico profesional, desarrollando mayor vinculación con el sector industrial y la matriz productiva de las distintas comunidades"
"Advertimos, además, que esta medida implica una amenaza directa a la estabilidad laboral de los docentes, que desempeñan sus funciones en los cursos que, según expresiones publicadas por parte de la cartera de educación del gobierno nacional, pretende eliminar. El cierre de cursos generaría despidos que obviamente vulneran derechos adquiridos y constituyen una afrenta intolerable hacia quienes sostienen día a día el sistema educativo de ETP", siguieron.
Luego, explicaron que "reducir la formación no solo es una medida regresiva, sino que afecta la competitividad de nuestro país en el escenario global. Una formación técnica de alta calidad es clave para sostener y proyectar la industria, la tecnología y el progreso".
Incluso, afirmar que la homologación de títulos y la movilidad profesional de los técnicos en el ámbito nacional e internacional se verán "comprometidas si disminuye la calidad y la duración de su formación", luego agregan: "Para mantener a nuestros egresados a la altura de las exigencias internacionales y con posibilidades de crecimiento en el exterior, es imprescindible conservar la solidez de nuestro modelo actual".
Por último, desde AMET, exigen a las autoridades educativas "el abandono inmediato de cualquier proyecto que busque reducir la duración de la formación en las especialidades técnicas".
"Reafirmamos nuestro compromiso con la comunidad educativa docentes, estudiantes, familias y sector productivo en la defensa de la educación técnica profesional, ya que es mucho más que una modalidad educativa: Es la garantía de un futuro de calidad y oportunidades para nuestra juventud, y una inversión dispensable en el desarrollo de la Argentina", explican.
"Defender la Educación Técnica y Agrotécnica es defender la capacidad productiva, el empleo digno y el futuro de nuestro país. En AMET, nuestra postura es clara: Ni un paso atrás en la defensa y el derecho de una Educación Técnica y Agrotécnica de excelencia", finalizaron.