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Los choferes piden aumento, pero "no hay plata": cómo se gestó el paro de colectivos que quizá continúa
Desde la UTA reclaman equiparación salarial con el AMBA, lo que implica más de 300 mil pesos de aumento, los empresarios sostienen que no lo pueden costear y los usuarios viven con la incertidumbre de si podrán o no acceder al transporte. La próxima semana habrá nuevas negociaciones y está abierta la posibilidad de una nueva medida de fuerza.
En una nueva jornada de paro de transporte en el gran Resistencia por falta de acuerdo salarial, resulta necesario conocer a profundad cual es el conflicto, que lleva a los usuarios a permanecer en un "limbo", sin saber si al salir de sus casas van a tener la posibilidad de tomar un colectivo. Para ello, Raúl Abraham secretario general de la UTA Chaco comunicó a Diario TAG cuál es el reclamo de los trabajadores y Hugo Domínguez, ministro de Infraestructura Obras y Servicios Públicos de la provincia informó que medidas se toma desde el Gobierno. Además, este medio intentó informar la posición empresarial, se contactó con representantes del sector que hasta el momento no brindaron respuestas.
Desde marzo que los choferes de colectivo en el área metropolitana cobran un salario de 737.000 pesos, número atrasado respecto del sueldo que perciben en el Gran Buenos Aires, donde se acordó un aumento salarial de 1 millón de pesos para junio y $ 1.060.000 para julio, cifras que en el interior del país aun no se perciben y que desde la UTA provincial reclaman bajo la premisa de a "igual trabajo igual salario".
Abraham explicó entonces que lo que solicitan los empleados del transporte "una equiparación salarial" y sostiene que "lo que reclamamos es justo", insiste en que lo que pretenden es que "se aplique lo que ya está (salarios del AMBA), no estamos inventando nada, es todo en el marco legal". Sin embargo, al no lograr acuerdo con el sector empresarial, este viernes se tomó la medida de fuerza, pero se aclaró que desde el sábado al lunes el servicio está garantizado , habrá una nueva reunión y exista la posibilidad de un nuevo paro el martes.
En este escenario de constantes negociaciones, el ministro Domínguez aclaró: "El tema salarial de los choferes es con las empresas, no con el Estado". Si bien desde el Gobierno "hemos convocado a dos nuevas audiencias públicas para, en el marco de la Ley, se ajuste el costo del pasaje", las cuestiones salariales son aparte.
Y reiteró: "La patronal de los choferes son las empresas, no es el Estado. Los choferes son empleados de las empresas y quienes tienen que resolver el tema salarial son las empresas. Nosotros hacemos aportes al sistema de transporte, en el mes pasado hemos invertido más de $ 1.400 millones y así lo seguimos haciendo mes tras mes, depositamos al sistema de tal manera de achicar el costo del pasaje".
Justamente, el costo del pasaje juega un rol clave en este conflicto, porque el monto actual de $ 710, se fijó a la par del salario de 737.000 para los choferes, por lo tanto, para costear un nuevo aumento se pretende que el boleto de colectivo se incremente a unos $ 1.800, lo que permitiría pagar los sueldos de $ 1.060.000.
Cabe destacar que las audiencias públicas para fijar el nuevo precio del boleto de colectivo serán recién los días los días 23 y 24 de septiembre y si bien aún no hay una nueva tarifa determinada, desde Infraestructura coinciden en que "es probable que ronde los $ 1.800".
Es evidente que, la resolución del conflicto salarial, va a seguir sumando episodios. A nivel local, se realizaron audiencias mediadas por el Ejecutivo provincial que no lograron destrabar la situación. Previamente, la UTA inició negociaciones con la Federación Argentina de Transportadores de Automotor de Pasajeros (FATAP), que solicitó la conciliación obligatoria, pero el sindicato la rechazó. Mientras tanto, el Gobierno nacional se mantuvo al margen.
Para el Gobierno provincial, por su parte "esto es un esfuerzo de todos". "El Estado que hace los esfuerzos para poner plata al sistema, de los empresarios para que ganen lo justo y necesario y de los choferes y empleados que tienen que saber que estamos en un momento complejo y que tener trabajo es sumamente positivo", resaltó Domínguez.
Desde la UTA insisten en que el salario de bolsillo es de unos 587.000 pesos y que esa cifra es insuficiente para sostener una familia. Por ello insisten en "la pata del Gobierno" para ver "qué aportes hacen".
Entonces, hasta ahora el servicio desde sábado a lunes está garantizado, Abraham afirmó que, pese al paro de este viernes, "no lo extendimos a sábado y domingo para no perjudicar a la gente. Vamos a esperar hasta el lunes; si no tenemos respuesta, el paro continuará y se irá profundizando, pudiendo llegar a ser por tiempo indeterminado. Pero creo que alguien tiene que intervenir y encontrar una solución a todo esto".
Cada una de las partes parece mantener postura firme y no querer ceder, por lo que el funcionamiento del servicio de transportes del área metropolitana es una incógnita para la semana próxima. "Hasta el lunes está garantizado el servicio. Ese día nos reunimos y definimos qué medidas tomaremos a partir del martes. Seguramente habrá paro. Hice todo lo posible para evitarlo y no quebrantar la paz social, pero aquí hay injerencia del Gobierno. Los empresarios tienen voluntad, pero dicen que no pueden", concluyó es secretario general de la UTA Chaco.
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