El Gobierno trabaja en una licencia de conducir sin vencimiento
En cambio, los conductores deberán presentar cada cinco años un certificado médico y una declaración jurada digital y gratuita.
El Gobierno planea anunciar en dos semanas la implementación de licencias de conducir sin vencimiento, una reforma estructural en conjunto con la diputada Patricia Vásquez. El Ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, confirmó que se trabaja en un proyecto que elimina la necesidad de renovar las licencias. En cambio, los conductores deberán presentar cada cinco años un certificado médico y una declaración jurada digital y gratuita.
Este proyecto responde a una encuesta de CECAITRA, donde el 65.5% de los conductores de CABA y GBA consideraron acertada la idea de renovar el registro completamente online. Vásquez, del PRO, propuso esta iniciativa, afirmando que traerá más libertad y responsabilidad a los conductores, eliminando el costo de renovación de licencias.
Sturzenegger comentó que el modelo se inspira en sistemas de otros países como Estados Unidos y México, donde las licencias no tienen vencimiento. La medida busca también reducir la corrupción en la emisión de licencias y simplificar el proceso de registro de automóviles, creando un registro único digital.
El proyecto de ley establece que las licencias de conducir no profesionales no tendrán fecha de vencimiento. Los conductores deberán actualizar su aptitud psicofísica cada cinco años con un certificado médico y una declaración jurada digital. A partir de los 75 años, esta exigencia será anual. La autoridad de aplicación elaborará un protocolo de evaluación y un registro público de médicos autorizados para emitir los certificados.
Sin embargo, expertos en Seguridad Vial, como Fabián Pons, advierten que esta simplificación podría reducir el control sobre la salud de los conductores, lo que podría comprometer la seguridad vial. Pons sugiere aumentar los controles en lugar de relajarlos, citando prácticas en países como Alemania, donde los conductores renuncian voluntariamente a sus licencias cuando ya no están en condiciones de conducir.
La principal preocupación de los especialistas radica en la posibilidad de accidentes provocados por conductores que no estén en condiciones de manejar, y la necesidad de un control más riguroso para prevenir incidentes graves antes de que ocurran.
