Vandalismo e intentos de robo, la realidad que azota al Jardín de Infantes N°177 del barrio Don Santiago
La institución educativa fue víctima de tres intentos de robo en tan solo una semana, sufre constantes actos de vandalismo, por lo que los padres solicitan mayor presencia policial, ante el temor que la inseguridad afecte a sus hijos.
El Jardín de Infantes N°177 del barrio Don Santiago, sufrió tan solo en la última semana tres intentos de robo en el establecimiento, pero ese no es el único problema que afecta a la comunidad educativa de la zona, además son víctimas constantes de vandalismo. Desde la institución realizaron las denuncias correspondientes a las que el Ministerio de Educación, quienes les garantizaron la reparación de los bienes dañados, sin embargo, muchas veces son los padres de los alumnos quienes colaboran con los arreglos.
Por esta razón Diario TAG se dirigió al jardín a dialogar con la directora y la madre una alumna para conocer cómo viven el día a día, la frustración por tener que reparar objetos rotos con sus propios medios y el temor de que alguna vez le suceda algo a los niños.
Este jardín alberga a niños de 4 y 5 años en dos turnos diarios, el último de los cuales termina a las 17:30. Después de esa hora, el edificio queda desocupado hasta la mañana siguiente, lo que lo convierte en un blanco fácil para los delincuentes. La comisaría más cercana se encuentra a 15 cuadras de distancia y funciona con un solo patrullero.
Además de los robos, los padres y el personal del jardín contaron que algunas personas ajenas a la institución utilizan la galería del establecimiento como refugio para dormir. Esta situación no solo agrava el problema de seguridad del jardín, sino que también afecta al barrio en su conjunto.
Karina Ledesma es la madre de una de las alumnas y miembro de la cooperadora, quien relató que lo que pretenden es mostrar "lo que venimos sufriendo por los robos y destrozos".
La directora interina Marcela Diacoluca contó que "hay actos de vandalismo constantemente", por esta razón "fui convocada por los papás miembros de la cooperadora, porque ellos están mal a raíz de la situación que el jardincito y la comunidad misma sufre". Además, explicó que "a nivel institucional, el Ministerio de Educación está en conocimiento, se hicieron las presentaciones electrónicas correspondientes correctamente, es decir que están al tanto de todo lo que viene sufriendo el jardincito y también se pidió seguridad policial".
La titular de la institución tomó esta acción "porque las familias están bajoneados, ellas luchan por el jardincito por verlo bien".
Karina Ledesma por su parte contó que hace pocos días rompieron una de las rejas para ingresar al edificio y "un papá la soldó".
Ante la consulta de Diario TAG sobre si ¿El ministerio de Educación reconoce los gastos?
La directora contó "sí, vino Infraestructura nos están arreglando cosas que nos han robado en enero y febrero", resaltó también que cada vez que la institución es víctima de estos actos "tenemos que convocar y pedir ayuda a los papás para tratar de cerrar y mantener cerrado el jardín".
Comentó también: "Tenemos tejidos nuevos que han puesto de Infraestructura, pero el tema del vandalismo en el barrio es impresionante, lo rompen para poder entrar y las seños buscan a los papás para cerrarlo, nos encontramos el tejido roto y el mismo papá que soldó la reja nos ayudó a cerrar".
Karina, por su parte, contó el otro gran problema que los aqueja en el edificio: "Cuando llegan los chicos y las seños temprano hay personas durmiendo en el jardincito, en la galería nos encontramos con gente que se queda toda la noche".
Ante esta situación Diario TAG consultó si esas personas ¿son del barrio y los conocen?
Karina respondió: "No los conocemos, vienen de todos lados, los días que hace frio o llueve quedan ahí quieren usar el techito como aguantadero, por eso nos haría bien que pase el patrullero", como la comisaría más cercana se encuentra a 15 cuadras y con un solo móvil para todo el barrio, cuando llaman a la Policía "vienen tarde, los vecinos ya están ayudando y se los levanta, es un peligro porque no sabemos cómo se duermen y menos como se van a levantar".
Relató que esto ocurre porque "acá es todo muy oscuro a las 22:30 de la noche en el barrio ya no hay casi movimiento"
A lo que la directora agregó que las algunas luces quedan prendidas y otras no porque ya no andan, "fuimos víctimas de robo de fluorescentes de tubos nuevos". E insistió "lo que se pide es la seguridad a la noche, las familias están solicitando la seguridad policial".
Diacoluca aseguró que por esta situación "los papas están tristes porque piensan ‘otra vez lo mismo’ y lo cuidan con mucho amor al jardincito que es del barrio y de la comunidad, nosotros estamos de paso" y si bien relató a esta seguidilla como de actos vandálicos como "un desgaste", concluyó: "Hay que seguir adelante por los niños".
