Rompió el silencio la joven que denunció a los ex jugadores de Vélez: "Después de violarme, se fueron a jugar al casino"
Abiel Osorio, Braian Cufré y José Florentín están con prisión preventiva en Tucumán. "Ellos hacían como si nada hubiera pasado", aseguró la víctima.
La joven que denunció por abuso a los ex jugadores de Vélez Sarsfield Sebastián Sosa, Abiel Osorio, Braian Cufré y José Florentíndio una entrevista por primera vez desde que a principios de marzo hiciera pública su denuncia contra los ex jugadores.
El hecho se remonta al pasado 2 de marzo, luego del empate de Atlético Tucumán y Vélez por la Copa de la Liga. La joven contó que tuvo su primer contacto con los jugadores en la zona mixta del estadio tucumano, donde periodistas y futbolistas se cruzan después de los partidos.
"El futbol es un ambiente de hombres y mi trabajo es moverme entre ellos. Para mí es lo más normal del mundo verlos moverse en grupo, o reunidos una concentración en los hoteles", detalló en diálogo con TN.
"Esa noche había jugado Atlético contra Vélez, estaba yo en la parte de zona mixta. Los jugadores salían por el lobby y ahí me ven los jugadores y empiezan bueno a sonreírme, a hacerme caritas y ahí me ve Sebastián Sosa, agarra su celular y lo empieza como a señalar y ahí agarro yo mi celular y tenía un mensaje de Sebastián Sosa que decía "Sí, te encontré"", explicó.
"Después de que me violaran, Florentín y Cufré se vistieron y se fueron a jugar al casino. Quedé tirada en la cama sin entender bien qué estaba pasando. Comencé a sangrar. Como pude me arrastré al baño para limpiarme. Regresé y me volví a tirar porque seguía mareada y no encontraba mi ropa. Allí advertí que Sosa seguía o parecía estar dormido y Osorio jugaba la play como si nada hubiera pasado. Empiezo a reprocharle lo que me habían hecho sus amigos y cómo no intercedió para evitar que me violaran. De repente, cuando pensé que lo peor ya había pasado, Osorio saltó de una cama a la otra y comenzó a violarme él también", describió.
"Por momentos tengo una angustia que no la puedo frenar. Me asusta mi futuro. ¿Cómo sigo? ¿Me voy a poder reincorporar a mi trabajo de periodista deportiva? ¿Qué jugador va a confiar en mí? ¿Cómo me saco el estigma de que yo fui la p*** que fue a acostarse con los jugadores de Vélez? Me llama la atención el prejuicio que hay con las víctimas de abuso sexual. ¿Acaso esperan vernos golpeadas, chorreando sangre, con depresión y ojeras?". Con esas palabras punzantes la periodista tucumana describe el estigma con el que cargan quienes se animan a denunciar.