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Lunes 3 de Febrero, 2025
 
 
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Sáenz Peña

Tío y sobrino viven en la calle luego de que un familiar los echó de su propia casa

Integrantes de una familia están pasando por una difícil situación de calle luego de haber sido echados a la fuerza de su propia casa hace casi una semana por unos parientes.

El hecho ocurrió en Sáenz Peña, donde tío y sobrino fueron echados con violencia de su vivienda por familiares y ahora están pasando por una difícil situación de calle.

Los damnificados comentaron que "el jueves pasado se juntaron entre 10 personas junto con uno de mis tíos y nos sacaron a la fuerza con golpes, puños, cadenazos, todo y nos tiraron todo lo que teníamos adentro de la casa, colchones, mesas, mercadería, todo", y agregaron:"Desde ese día estamos peleando acá con mi tío afuera, nos instalamos frente a la casa, pero igual ellos nos insultan, no quieren que estemos acá".

La vivienda ubicada en calle 23 entre 26 y 28 pertenecía a los padres de uno de los damnificados, quienes fallecieron, y la propiedad entró en sucesión, sin embargo, uno de los hermanos se apoderó de dicha vivienda dejando en la calle a su otro hermano y sobrino que hace muchos años estaban viviendo en ese lugar.

Este hermano luego de que fallecieron sus padres primero se apoderó de una parte del terreno, luego de otro y ahora ya tomó toda la propiedad. Tanto tío como sobrino improvisaron una choza para alojarse allí, ya que tienen otro lugar donde vivir. "No respetó ni la sucesión, no respetó nada y nos puso personas para que nos pegue, una injusticia lo que estamos viviendo nosotros", comentó la víctima.

Por todas las agresiones que sufrieron y por el desalojo, tío y sobrino realizaron la correspondiente denuncia y esperan que la policía, la Justicia o las autoridades competentes actúen en consecuencia. "Este familiar que se apoderó de la vivienda tiene su propia casa en otro lugar, tiene todo, él anda bien, tiene negocio, de todo, señaló el tío, mientras que el sobrino expresó: "Mi tío, es discapacitado, sufre el corazón y tiene quebrados los brazos, por eso siempre estamos con él, en todo lo que podemos ayudarlo lo hacemos".

Por último, pidieron a alguna autoridad competente que intervenga con él y aseguraron: "No podemos negociar, pero queremos llegar a un acuerdo, y que cada uno tenga lo suyo porque no se va a poder vivir así".

"Estamos en la calle y con miedo porque no sabemos si a la noche van a venir y nos van a disparar como ya lo hicieron días atrás", señalaron.