Entre insultos y el dolor de los familiares, declaró "Pachi" Escalante por el doble homicidio en Quitilipi
Esta mañana, alrededor de las 9:30 de la mañana, en la sede de Fiscalía de la localidad de Sáenz Peña, amplió su declaración Francisco "Pachi" Escalante por el doble homicidio de Soledad Antonela Altamirano y Evaristo de Jesús Saux.
Al salir de Fiscalía, Escalante fue insultado por familiares y amigos de las victimas que no pudieron contener la rabia ante el aberrante hecho que cometió la mañana del 8 de marzo. A través de un vivo realizado por el medio La Tecla Online, se pudo ver como los presentes comenzaron con los repudios. "Asesino de mierda, hijo de puta. Te cagaste en tus hijos, sorete. Te vas a podrir en la cárcel", vociferó una mujer que enfrentó al supuesto asesino, antes de subirse a la camioneta de la policía.
Momentos después se vivió un momento desgarrador cuando la madre de Antonella se la vió visiblemente quebrada sosteniendo una pancarta que pedía justicia por su asesinato. "¿Por qué, mi amor?", comenzaba su plegaria, siendo abrazada por otra mujer que la acompañaba en su dolor. "Lo único que querías era ser libre. ¿Por qué no la dejaste, maldito?", en alusión a Escalante, quién fuera su pareja durante varios años.
"Dejó a mis nietos sin su madre. Que me lo diga en la cara. ¿Por qué lo hiciste, maldito? Te amo mi hija. Un hijo de puta te vino a quitar la vida. Quiero justicia, por favor", se repetía constantemente la madre de Altamirano.
Otra persona que dio su declaración fue el padre de Evaristo Saux, acompañados de los hermanos de la segunda victima y expresó, entre lágrimas: "Solo quiero que haya justicia. Por favor".
EL HECHO
El 8 de marzo, vecinos del barrio Mariano Moreno de la localidad de Quitilipi avisaron a la policía sobre dos personas que se encontraban sin vida en una casa de la zona.
Las víctimas fueron identificadas como Soledad Antonela Altamirano de 30 años, una maestra jardinera de la localidad, y un hombre de 27 años llamado Evaristo de Jesús Saux quien era profesor de química. Ambos fueron encontrados sin signos vitales en la galería de la vivienda. Desde el primer momento se empezó a sospechar de Francisco Escalante, quién era expareja de Altamirano.
Dos días después, el supuesto asesino se entregó a las fuerzas policiales en la Dirección Zona Interior de Sáenz Peña, acompañado por su abogado, Miguel Lukach. Además, se supo que la joven Altamirano había realizado en enero, una denuncia contra su expareja en la Comisaría de Quitilipi por una discusión que mantuvieron al momento de la entrega de los hijos que compartían.
Fuentes judiciales cercanas al caso confirmaron a Diario TAG que ambas victimas sufrieron reiteradas apuñaladas en sus cuerpos que les causó la muerte.
