Una a una las condenas de los 8 Rugbiers
El hecho que tuvo lugar en Villa Gesell en el 2020, cuando un grupo de 8 rugbiers mató a golpes a Fernando Báez Sosa.
La Justicia dictaminó el fallo por el grupo de Rugbiers que mató a golpes a Fernando Báez Sosa en el año 2020 durante el verano de Villa Gesell. Tras tres años de espera se obtuvo la resolución de la Justicia que estableció la prisión perpetua para Thomsen, Ciro y Luciano Pertossi, Comelli y Benicelli, mientras que para Cinalli, Viollaz y Lucas Pertossi fueron de 15 años.
Máximo Thomsen 23 años, Prisión perpetua.
La sentencia del joven radica en ser una de las personas que golpeó a Báez Sosa hasta quitarle la vida. Incluso, fue la persona responsable de propiciarle el golpe fulminante pateándolo en la cabeza. En previas declaraciones estableció que nunca tuvo "la intención de matar a alguien".
Previas a distintas versiones, fueron videos y la marca de sangre en sus zapatillas las principales pruebas de su autoría en el delito.
Ciro Pertossi 22 años, prisión perpetua.
La condena es por coautor de "homicidio doblemente agravado por el concurso premeditado de dos o más personas por alevosía, en concurso ideal con lesiones leve". Según testigos, Pertossi fue una de las primeras personas que empezó a golpear a Báez Sosa, a lo que Fernando Burlando -abogado defensor de la víctima- logró determinar que fue a traición.
Esta fue la persona que se lamió los dedos para limpiarse la sangre al ser interceptado por el personal policial. A la vez, también se encontró sangre de la víctima en el pantalón que llevaba puesto el día del hecho.
Fue el que publico en el grupo de amigos "Chicos, no se cuenta nada de esto a nadie".
Enzo Comelli 22 años, prisión perpetua.
La causa es de coautor de "homicidio doblemente agravado por el concurso premeditado de dos o más personas y por alevosía, en concurso ideal con lesiones leves". Fue uno de los que impidió que los amigos de Fernando Báez Sosa puedan defender al joven. Fue autor del cordón para que nadie externo pueda defender a Fernando mientras era golpeado por los rugbiers.
También fue uno de los integrantes del grupo que llevaba a cabo cuentas falsas en donde buscaban el apoyo de los usuarios de las redes sociales.
Luciano Pertossi 21 años, prisión perpetua.
Similar a las causas ya nombradas, Luciano Pertossi fue uno de los que dijo "quédate tranquilo que me lo voy a llevar como trofeo" mientras golpeaba en la cara a Fernando. Poseía rastros de sangre de la víctima en todas las prendas que llevada ese día.
Matías Benicelli 23 años, prisión perpetua
Este es el último de los rugbiers que recibió la prisión perpetua, con la misma causa a los anteriores. Los testigos del delito lo adjuntaron como agresor directo en la golpiza brindada a Báez Sosa. Fue el que dijo "a ver si volvés a pegar, negro de mierda".
Blas Cinalli 21 años, 15 años de prisión.
La causa fue de partícipe secundario de "homicidio doblemente agravado por el concurso premeditado de dos o más personas y por alevosía, en concurso ideal con lesiones leves", si bien ningún testigo lo enlazó al hecho, encontraron rastros de su ADN debajo de las uñas de Fernando Báez Sosa. Frente a esto, la Fiscalía lo determinó como uno de los agresores directos.
Esta persona fue la que alertó en el grupo de WhatsApp que había la posibilidad de que hayan matado a alguien. "Nos peleamos. Ganamos contra unos chetos, los rompimos", "creo que matamos a uno", "le dimos murra a uno con el 'perto', lo recargamos a palo, pero mal. Nos vinimos corriendo a la casa", "yo sólo quiero tomar vino y fumar flores".
Lucas Pertossi 23 años, 15 años de cárcel.
Fue la persona que filmó con su teléfono celular cuando era sacados del boliche y luego fue uno de los que inició el ataque contra el joven de 20 años. Fue la persona que dijo "Caduco" en las conversaciones que mantenía con su grupo de amigos al determinar la muerte de Fernando. "Estoy acá cerca donde está el pibe y están todos ahí a los gritos, está la policía, llamaron a la ambulancia... caducó"
Ayrton Viollaz 23 años, 15 años de prisión.
Fue la persona que instó a que su grupo de amigos inicien la golpiza que le quitó la vida a Fernando Báez Sosa. Fue la persona que evitó que se ingresen personas para poder ayudarlo a Fernando.Por lesiones en el nudillo, desde la Fiscalía establecieron que fue uno de los agresores directos de la víctima.
