Emotivo reencuentro: un hombre sorprendió a su padre en su cumpleaños, luego de años sin verse
Era el cumpleaños número 85 de su padre y decidió sorprenderlo tras varios años sin verse, luego de que se mudara de Funes, en Santa Fe, con destino a Bariloche.
La historia fue compartida en redes sociales por sus protagonistas y mostraron el emotivo encuentro entre el padre y su hijo.
El hombre detuvo su vehículo en un control de tránsito y entregó su documentación con total normalidad, sin embargo, todo aquello era falso, y metros más adelante lo esperaba una sorpresa.
"Documento por favor del señor", exclamó la falsa inspectora de tránsito, vestida con un chaleco verde, barbijo, gorra y anteojos de sol. Y luego preguntó: "¿Motivo de la visita a Funes?" a lo que la acompañante, quien grababa toda la situación, contestó: "Un cumpleaños, festejamos justamente el de él. Cumple 85″.
Y el insólito interrogatorio continuó: "¿Profesión del señor?". "Es jubilado. Es escritor además", respondió la mujer que se encontraba en el auto junto al hombre. Y a cambio obtuvo una inesperada respuesta: "Otro que cobra sin laburar".
En este momento del video difundido por el medio local RedBoing se comienza a palpar el enojo del hombre, que no entendía lo que estaba sucediendo. La inspectora lo hace bajar de el auto y le dice que hay un problema con su documento de identidad: "Hay un caso de identidad doblada acá".
"Hay dos documentos con el mismo nombre. ¿Me puede aclarar esto?", insistió la mujer, mientras sostenía dos carnets frente al cumpleañero. "¿Dos documentos? Este es mi hijo", le explicó el hombre, señalando la foto del documento. Y le explicó a la inspectora que su hijo residía en Bariloche, hace 30 años.
"No puede ser, porque este documento lo encontré acá. Acompáñeme por favor", siguió la mujer, y lo guio hacia una camioneta que se encontraba estacionada delante. Segundos más tarde, un hombre encapuchado descendió del vehículo y sorprendió a su padre con su presencia por su cumpleaños. "Qué quilombo que armaron, eh", le dijo su hijo mientras lo abrazaba.
El cumpleañero, visiblemente emocionado, solo atinó a responderle: "Qué loco". Antes de volver a abrazarse, su hijo le dejó en claro que él solo había sido partícipe y no autor de la broma: "No era mi idea".