Amenazaron de muerte a Cristina Kirchner y la jueza pidió reforzar su custodia
Esto se da a tan sólo dos semanas del intento de magnicidio contra la vicepresidente en Recoleta. Actualmente, la Policía intenta localizar el punto exacto en el que se realizó la llamada.
Este lunes por la tarde, mediante un llamado al 911, una mujer de La Plata aseguró que iba a matar a Cristina Kirchner. Ante esto, sonaron las alarmas en el entorno de la vicepresidente, en medio de la investigación por el intento de magnicidio del 1 de septiembre.
La jueza federal María Eugenia Capuchetti, quien investiga el intento de atentado en su contra, pidió que se reforzara su custodia. Frente a su solicitud, el Gobierno analiza la medida para garantizar la seguridad de la ex mandataria.
Ayer por la tarde, desde el Ministerio de Seguridad dieron aviso a Capuchetti, quien escuchó las grabaciones de la llamada y envió un oficio en el que pidió que se reforzara la custodia de Cristina.
Este pedido estaba siendo considerado en estos momentos por el Ministerio, mientras los expertos informáticos de la Policía seguían analizando la llamada para tratar de localizar el punto exacto desde donde fue hecha y, de esa manera, identificar a su autora.
En paralelo continúa la investigación por el intento de homicidio contra Cristina Kirchner el 1 de septiembre pasado y por el cual permanecen detenidos Fernando Sabag Montiel, acusado de gatillar un arma en la cara de la titular del Senado, y su novia, Brenda Uliarte, sospechada de haber colaborado en el plan.
Este lunes se hallaron pruebas cruciales en el celular de Uliarte, en las que se puede observar mensajes que el hombre le envía a su pareja el 27 de agosto pasado en lo que fue un plan para asesinar a Cristina en las inmediaciones de su departamento en el barrio porteño de Recoleta, aunque no lograron que saliera como esperaban.
"No, ya se me metió adentro y el escenario el anfiteatro lo sacaron. Le toqué la espalda a Axel Kicillof y se metió en un Toyota Etios eh y se fue, un quilombo. Ella está arriba pero no creo que salga así que ya fue, dejá, voy para allá, quédate ahí. No traigas nada", decía uno de los mensajes.
Frente a este contenido, la jueza a cargo de la causa impulsó nuevamente el secreto de sumario.