Macron y Le Pen pasan a la segunda vuelta de las elecciones en Francia
Según las primeras estimaciones, Macron se ubica, junto a Le Pen en la segunda vuelta de las elecciones como los dos candidatos más votados. Se espera que este 24 de abril se reviva el duelo que tuvo lugar en 2017, cuando ambos candidatos se enfrentaron en la segunda vuelta de las elecciones.
En esta primera vuelta, el presidente Macron obtuvo aproximadamente un 28,6% de votos, mientras que su rival, la candidata Le Pen, se hizo con un 24,4%.
El panorama, sin embargo, parece muy distinto al de hace cinco años. Actualmente, Le Pen suavizó su imagen, que ya no asusta a la mayoría de los franceses. Por lo que en esta oportunidad se estima que se acercará mucho más a Macron en votos, que en 2017. Hace cinco años, el presidente derrotó a su rival con un 66% de votos frente a un 34%.
En la tercera posición de esta tercera vuelta se ubica el líder de la izquierda populista, Jean-Luc Mélenchon, con un 20,2%, según Ifop.
El momento clave del enfrentamiento será el debate televisado que se realizará el 20 de abril. En 2017, Le Pen salió muy malparada del debate ante Macron por su falta de preparación y de dominio de los temas.
En esta oportunidad, la candidata promete una reformulación profunda de la relación de Francia con la UE, una alianza con Rusia y un cambio constitucional que le daría manos libre para aplicar políticas más duras contra los inmigrantes y restaría derechos a los extranjeros que viven en Francia. Su campaña centró en la subida de precios y en las medidas para aumentar los salarios y llegar a fin de mes.
Durante las próximas dos semanas, el objetivo de Le Pen será obtener los votos de aquella parte de la población descontenta con el presidente, por su imagen de hombre elitista y arrogante. Y, por otro lado, afianzar la imagen que lleva años cultivando, como una líder próxima a los franceses, amable y humana. En esta campaña parece haber conectado con una parte significativa del electorado.
En el caso de Macron, durante estas dos semanas deberá convencer a los votantes de su visión para Francia y de que su propuesta no es la misma tras cinco años, marcados por las revueltas sociales y la pandemia. Desde su entorno se insistirá en que, en un contexto de guerra en Europa, pueden fiarse de él para gestionar las crisis de los próximos años, retratando a Le Pen como una candidata inexperta, cercana a la Rusia de Vladímir Putin en la política internacional y ultraderechista en la ideología, haciendo de su gestión un peligro para los franceses.