Desarticulan a una banda de delincuentes que robaban motos y las guardaban en un aguantadero
Luego de realizar varios allanamientos en distintos puntos de la ciudad de Sáenz Peña, la policía de aquella ciudad logró recuperar 9 motos.
A través una serie de investigaciones en Sáenz Peña, Villa Ángela y otras localidades, efectivos policiales lograron dar con una banda que se dedicaba al robo de motocicletas para luego comercializarlas ya sea entera o en partes.
La División de Investigaciones Complejas de Sáenz Peña en forma conjunta con las demás divisiones del interior, a cargo de del jefe de Departamento de investigaciones Complejas Interior comisario mayor Marcelo Kostecki, organizaron varios grupos de trabajos quienes desplegaron tareas de recopilación y búsqueda de información.
Para ejecutar estas tareas, se tuvieron en cuenta imágenes fílmicas de los hechos ocurridos. Con esos datos se logró obtener "valiosa información", y se logró se logró la detención de una persona la cual se encuentra alojada en la localidad de Villa Ángela.
El titular de la División Complejas de Sáenz Peña, subcomisario Darío Romero comentó que "con las tareas investigativas llevadas adelante por el personal policial, se pudo establecer que en Sáenz Peña estaba operando una posible banda o red de personas, quienes tenían guardadas en diferentes puntos de esta ciudad motocicletas de dudosa procedencia o provenientes de robos", señaló.
Posteriormente, se supo que algunos de los rodados habrían sido desmantelados para comercializar como repuesto y otras de ellas remarcadas en sus numeraciones de motor y chasis contando con documentaciones que se presumen serian falsas. Con toda esta información y teniendo identificados los posibles lugares de escondites, se desplegaron los efectivos por distintos puntos de la ciudad, y en la jornada de hoy procedieron al secuestro de 9 motocicletas de distintas cilindradas.
Son nueve motos en su mayoría robadas, una de ellas sustraída luego que una mujer fuera amenazada con un arma de fuego.
En dicho operativo también verificaron dos motos similares, ambas marcas GILERA, modelo SMASH, una de color gris y otra de color blanco. Al verificarse las numeraciones de motor, chasis, y chapa patente resulto que eran iguales, dando intervención a la planta Verificadora Policial N° 3.
De esa verificación, resultó que los estampados de motor y chasis no serían originales de fábricas y las documentaciones serian apócrifas. Posteriormente se supo que el poseedor de ambos rodados declaró, haber adquirido dichos rodados por la suma de 30.000 pesos.
