Aborto legal: la postura de los diputados nacionales por Chaco frente al posible futuro debate
Por Cecilia Gonzalez.
El 2018 fue un año que marcó un punto de inflexión en el debate sobre los derechos de las mujeres, luego de que el proyecto de ley de Interrupción Legal del Embarazo fuera tratado en el Congreso, donde obtuvo media sanción, y en el Senado, donde fue rechazado.
A raíz de esta desaprobación, la despenalización del aborto no pudo ser ley en Argentina y quedó a la espera de poder volver a ser tratado en ambas Cámaras; tema que levantó vuelo y generó polémica nuevamente durante la campaña electoral del 2019 por parte de los candidatos a presidente.
En ese momento, el que finalmente quedó en el sillón de Rivadavia fue Alberto Fernández, quien durante la campaña y ya en su cargo aseguró que enviaría el proyecto de ley al Congreso para que sea nuevamente debatido, lo que generó expectativa en los distintos sectores que buscan su legalidad y despenalización.
A principio de este mes, el presidente confirmó que durante noviembre enviará el proyecto a la Cámara de Diputados de la Nación, lo que todavía no ocurrió, aunque se dice que este martes 17 de noviembre a la tarde finalmente Fernández cumplirá con su promesa de campaña y de gestión.
Al respecto, Diario TAG dialogó con los diputados nacionales por Chaco para conocer cuál va a ser su postura en el caso de que el proyecto de ley de la Interrupción Legal del Embarazo obtenga el quórum para ser tratado y votado.
En la sesión del 2018, la diputada Aida Ayala había votado a favor "de la legalización del aborto, que hoy al ser penalizado promueve la clandestinidad sin amparo del Estado, hacer Ley este proyecto promueve la educación sexual para elegir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir".
Sin embargo, al tiempo Ayala cambió su opinión y la mantiene en la actualidad: "Mi posición va a ser en contra de la práctica del aborto, o sea, no voy a votar a favor de la despenalización porque ese fue el objetivo en el 2018, que la mujer no vaya presa, porque se realizan igual abortos ahora, entonces lo que queríamos era la despenalización".
"Luego, queríamos con todo lo que sucedió con la manifestación del pueblo de Chaco, con las instituciones, fue un tema que no estaba en agenda de campaña y la verdad que cuando uno se equivoca tiene que tener la valentía o la bondad, la generosidad de decir ‘perfecto’. No me puedo arrogar yo la representación o la decisión de un millón de personas que son ciudadanos de Chaco, aunque sea diputada de la Nación Argentina", indicó en contacto con este medio.
Además, manifestó que "no coincido en que se trate porque se ha manifestado el pueblo de Chaco en desacuerdo casi en su totalidad, entonces es un tema muy difícil de decir ‘yo pienso tal cosa’ y voto porque tengo que escuchar al pueblo porque esa es nuestra misión".
"Lógicamente todos los sectores que se habían enojado en su momento, yo nunca estuve en contra de la vida, siempre estuve a favor de la vida y ahora voy a votar en contra de la legalización del aborto", señaló.
En cuanto a los abortos que de todos modos ocurren con las consecuencias que genera la clandestinidad, la diputada sostuvo que "eso fue una lucha y una ocupación siempre desde los 12 años en que fui intendente de Resistencia, cuando nosotros vimos muchas de esas cuestiones y lo que hacíamos era de abajo hacia arriba concientizar, educar en esto a las mujeres, sobre la prevención de los embarazos no deseados pero también tiene que ser una función de todas las instituciones".
"Así como prevenimos distintas situaciones de cualquier tipo de ataque a la salud y como hacíamos buenas prácticas desde la Estudiantina, la Subsecretaría de Género y Familia, desde el Área de Adicciones… también con las mujeres tratamos muchísimo estos temas y el tema de trata de personas", recordó y agregó: "Es empezar de abajo hacia arriba, que no se interrumpa, que sea una política de Estado, que las mujeres sepan que tienen al alcance formas de prevenir un embarazo no deseado. Es un trabajo que hay que hacer, que está reglamentado, que existe, que está en el Ministerio de Salud también, que hay otras provincias que han avanzado".
En este sentido, enfatizó en que "el aborto clandestino que se da, que se dio siempre, que atenta contra la vida de las mujeres, las mujeres siguien muriendo, se combate con más educación. Igual las mujeres no van presas, aunque se denuncie no van presas; así que esa despenalización es lo que yo con mi experiencia quería que se modifique porque igual uno sabe que ocurre".
"Al no ir detenida la mujer, lo que tenemos que hacer es educar y prevenir y saber que las mujeres tienen a su alcance otras formas de cuidarse, sobre todo en los sectores más vulnerables donde no llega la información, es educar y educar. Desde los centros comunitarios municipales que es la primera trinchera y desde los centros de salud que deberían ser los centros de prevención primaria que en realidad no están funcionando como tales o son insuficientes", finalizó Ayala.
Por su parte, la diputada Lucila Masin había votado a favor del proyecto de ley y señaló que "mi postura va a ser la misma que ha sido en el año 2018. Yo creo que hay infinidades de motivos para estar a favor y acompañar un proyecto de estas características. En principio, porque también existe una voluntad política por parte de nuestra gestión de Gobierno, porque sabemos que se trata de una cuestión de salud pública respecto al acceso de las mujeres para tener las garantías efectivas por parte de las instituciones sanitarias justamente para practicarse un aborto".
"Hoy esas condiciones no son las mismas, hay una posición asimétrica de acuerdo a las características de la población, a su estado socioeconómico, a la realidad que atraviesan y viven un montón de mujeres y porque fundamentalmente sigue siendo clandestino", resaltó.
Asimismo, consideró que "lo que pretendemos y buscamos es que el Estado pueda intervenir en esos casos de desigualdad sanitaria y que sobre todo también pueda atender una demanda y una problemática que es histórica en nuestro país, también en el mundo, por lo cual es indispensable poder contar con esta ley para acompañar y respaldar a las mujeres y a las personas con capacidad de gestar pero fundamentalmente haciéndolo con un Estado presente, teniendo en claro que también dentro del proyecto se prevé la posibilidad del acompañamiento en los primeros 1.000 días para aquellas mujeres, aquellos cuerpos gestantes que no decidan abortar".
Entre sus fundamentos expuestos en 2018, la diputada había dicho que "la clandestinidad mata", opinión que mantiene en este 2020 y remarcó que "hay condiciones asimétricas según la situación socioeconómica de un montón de mujeres. En nuestro país hay quienes pueden acceder en las mejores condiciones a efectuarse una práctica de aborto pero las mujeres más pobres de nuestro país son las que son empujadas a la clandestinidad. Entonces sabemos que las mujeres mueren producto de esos abortos mal practicados".
"Lo que nosotras pretendemos y queremos y sostenemos históricamente tiene que ver con una percepción colectiva, no solamente individualista, sino de lucha colectiva con el acompañamiento de un montón de sectores, de asociaciones de la sociedad civil, de organizaciones feministas que tienen que ver con igualar derechos. Creo que esa es la premisa fundamental para poder discutir esa ley y sobre todo también haciéndolo con la madurez política que se necesita para este debate y estar también a la altura del momento histórico en ese contexto y en esa situación", indicó.
Además, Masin hizo hincapié en que "es una ley emblemática, es una ley trascendental, es una ley que también marca antecedentes de discusión, de lucha para América Latina hacerlo en nuestro país, hacerlo en Argentina y me parece que eso es indispensable porque sobre todas las cosas los abortos en nuestro país se siguen produciendo, se siguen generando tengamos ley o no tengamos ley".
"Lo importante de todo esto es que pensemos que el Estado tiene que ser el garante para tener un derecho más, una conquista más hacia las mujeres y sobre todo haciéndola en las mejores condiciones. Nosotros no queremos un Estado que le ponga la espalda o que desconozca esta realidad porque insisto en lo mismo, en el 2018 estuvimos muy cerca de poder tener la ley, no sucedió así y fuimos respetuosos de la voluntad popular, fuimos respetuosos también de las decisiones que se habían tomado en su momento", recordó.
Por último, señaló que "en el mismo sentido creo que tenemos que ser respetuosos en este momento para discutirlo, para debatirlo y para tratarlo en el Recinto que no tendrá las mismas características que han sido en 2018 pero entendemos que necesitamos finalizar el año o iniciar el año con esta sanción y con esta ley que es histórica y que viene siendo una lucha de tantos años".
Otro de los consultados por este medio fue el diputado Aldo Leiva que no estaba en dicho cargo en la sesión del 2018, sino que asumió al año siguiente y al respecto del futuro tratamiento del proyecto de ley sostuvo que "es un compromiso que hizo el presidente en la campaña electoral".
"Respecto a mi postura es una cuestión personal pero sin dudas habremos de charlarlo en el bloque como ocurre siempre con los temas que son trascendentes para el Gobierno, así que en lo inmediato no voy a plantar mi voto porque estimo conveniente ver y hablar en el seno del bloque", indicó.
En cuanto a los abortos clandestinos que se realizan, Leiva opinó que "s una cuestión no sólo de Argentina, sino de muchos países del mundo, donde sin dudas detrás del aborto clandestino hay un gran negocio y eso genera toda una cuestión que afecta no solamente a la mujer que clandestinamente puede llegar a hacer un aborto, sino a todo su núcleo familiar. Genera consecuencias tremendas que basta ver las estadísticas no solamente a nivel nacional, sino también internacional".
Por su parte, el diputado Gerardo Cipolini que tampoco ocupaba la banca en el 2018 precisó que "mi posición pública y notoria es acompañar a la gente que de momento opina que no es la circunstancia argentina ideal para plantear un tema tan importante que va a dividir a la sociedad aún más de lo que está dividida, es generar un problema que es necesario resolver pero creo que no es el momento adecuado para hacerlo".
"Además, están sonando muchas voces dentro de nuestro espacio, inclusive en el espacio del oficialismo, que aboga por un plebiscito popular, una consulta ciudadana para que la sociedad se expida respecto de la viabilidad o no del proyecto", mencionó.
Además, consideró que los abortos clandestinos son "un tema a resolver. No tengo tomada una posición pública al respecto, si bien tengo una cierta visión".
"En principio voy a votar en contra de la ley; si no se modifica, si no trae algo que la haga desde mi punto de vista más contemplativa", finalizó Cipolini.
Respecto de los diputados Elda Pértile, Alicia Terada y Juan Mosqueda, Diario TAG no obtuvo respuesta, aunque cabe recordar que en 2018 estos tres legisladores habían votado en contra del proyecto de ley de la Interrupción Legal del Embarazo.
Entre sus fundamentos, Elda Pértile había señalado que "decir que la vida comienza recién en la semana 14 es negar la concepción, no llegaríamos a la semana 14 si no hubiera habido vida desde la concepción".
Además, "rechazo esa afirmación que dice que ‘las mujeres decidimos sobre nuestro cuerpo’ porque el niño por nacer que está dentro de nuestro vientre está suficientemente demostrado en el tiempo que tiene su propia identidad, su propio ADN, es una persona distinta de la madre y, mal que a algunos les guste o no les guste, tienen un padre".
"La madre que aborta es una madre que va a llevar un dolor toda su vida que quizás al momento de abortar los motivos la impulsaron, la llevaron, no pudo hacerlo consciente, no pudo haberlo sentido, pero en el tiempo testimonios de vida me afirman que realmente esa madre va a sufrir siempre. Es más, va a calcular cuántos años pudo haber tenido ese hijo, cómo pudo haberlo llamado a ese hijo. Éstos para mí son testimonios de vida que los puedo reproducir en base a casos que he conocido", consideró Pértile.
Por otro lado, la diputada Alicia Terada fundamentó en 2018 que "el aborto no es legal porque es inconstitucional; no es seguro porque alguien muere; no es gratuito porque alguien tiene que hacerse cargo, en este caso el Estado; no es libre porque alguien no elige, la madre o el niño; no es derecho porque se mata a la persona".
"La vida humana, como dice el Código Civil en su artículo 19, comienza con la concepción, eso es ratificado por los tratados internacionales y también por nuestra Constitución Nacional", indicó y finalizó: "Soy consciente que en Chaco existen abortos, personas que se mueren por la existencia de estos, pero también sabemos que existe la muerte de la persona por nacer cuando se producen esos abortos".
Por último, el diputado Juan Mosqueda no se había expresado en 2018 respecto de los fundamentos de su voto en contra de la despenalización del aborto.